Hola, Hola:
Hoy estoy superactivo, despues de los días de descanso y no voy a dejar pasar la oportunidad de hablaros de José Luis y Matty, dos amigos, que conozco desde el año 2001 y con los que solía reunirme, junto con más gente los jueves por la tarde, pues bien, ellos son un matrimonio (su hija "pequeña" tiene alredor de 25 años y pronto se va a casar) que decidieron irse a Chile hace dos años y medio a ayudar a los más necesitados, ya les queda poco para regresar definitivamente a España, y de vez en cuando cuantan a sus conocidos su trabajo como voluntarios, sus problemas e inquietudes.
Muy queridos amigos:
Enviamos nuestro saludo y cercanía a cada uno, con nuestros ánimos para vuestras dificultades y felicitaciones para vuestras buenas noticias. Quisiéramos transmitiros en esta carta el refrescante soplo de aire fresco que nos llega de nuestros hermanos de América del Sur.
Comentábamos entre nosotros, que al inicio de la misión nos sorprendía mucho e incluso nos molestaba el sentido del humor, aun en conversaciones serias, o las tomaduras de pelo que te hacían sin conocerte; justo ahora esa frescura de la gente y esa alegría es la que más valoramos y nos da sentido a eso del Nuevo y Viejo Mundo. Así es que aquí, estamos remozándonos en éste nuevo mundo con una desigualdad y pobreza grande, quizá de otro signo, aunque no sabemos si mayor que la de nuestras sociedades del bienestar y sin embargo con una alegría desinhibida que se respira y se transmite aun en medio de grandes tragedias.
Otra de las cosas que mas disfrutamos y nos sorprende, es la capacidad de asociación que tienen; aquí las asociaciones de vecinos funcionan de verdad y son los portavoces de las necesidades ante la Municipalidad, aunque son personas con no demasiada cultura y en términos absolutos podrían ser considerados "pobres", inician sus reuniones con gran seriedad y dan mucha importancia a que las cosas se hagan como corresponde, las decisiones se toman escrupulosamente consensuadas, cada uno habla por turno… tenemos la percepción de que no son muy ejecutivas, pero desde luego es una lección de convivencia y democracia.
Por otro lado están los bingos que se hacen en las poblaciones: porque uno murió y se precisa plata para enterrarle, porque a la niña de la Seña Flora la tienen que operar, porque a la Seña Antonia la tienen que ingresar y su familia no tiene plata para tomar la movilización... y mil cosas más, siempre son cosas humanas que se expresan en petición de ayuda y siempre hay algún comité que te aborda por la calle y te dicen, empezando por supuesto con un saludo retórico y largo (como corresponde) y su voz melosa y cantarina: " Oiga vecina, ¿me podía cooperar?, es que sabe que, tenemos un problemita.." .
En España apenas sabemos lo que ocurre dentro de nuestras familias, porque somos celosos de contar nuestras intimidades y lo que nos preocupa, nos duele o necesitamos, las urbanizaciones aparecen silenciosas; por eso el comprobar como esta gente conversa sin dificultades de que perdió su trabajo y no tiene para "mercadería", que su esposo tiene otra mujer, que su hija está embarazada con 14 o 15 años, que a su hija la violaron, que su papá pegaba a su mamá y a ella, o que su marido la pega, o la pegó. Uno se siente inundado de tanta vida en bruto, a borbotones que acompaña diariamente a vivir a otros y que enriquecen nuestra propia vida.
Nuestra presencia en el Programa D. Bosco Vida compartida, abarca todas las casas tanto de acogida de niños de la calle, como en las comunidades de rehabilitación, Este año se nos han abierto todas las puertas y nos movemos como pez en el agua; El Director ejecutivo (el "que la lleva" como dicen por aquí ), no sabemos si nos tolera o como él asegura está contento con nosotros, pero lo cierto es que nos deja trabajar, así es que estamos disfrutando de este tiempo de gracia en el que podemos hablar libremente con los educadores, con los niños, jóvenes y adultos en rehabilitación, sin sobresaltos.
Nuestro acompañamiento con los chiquillos es universal como os decimos estamos en todas las casas y además de que ellos saben porqué estamos aquí, compartimos todos los temas que pensamos y comprobamos que les pueden interesar, eso sí, rompiéndonos un poco la cabeza para variar de dinámicas, canciones, teatro, pinturas, concursos, competiciones, debates... cuando vamos a las casas en que están los niños de la calle, nunca sabemos con qué nos vamos a encontrar, ni de qué vamos a acabar hablando, pero ellos acostumbran a darnos el pie y nosotros nos tomamos rápidamente la mano; la verdad es que nos reímos mucho.
Cuando nos comentan algunas personas amigas de la Parroquia que debe ser duro eso de que los chiquillos vengan, estén un tiempo, se "arranquen" (se vayan) y aparezcan al cabo de un tiempo hechos una pena, les comentamos que lo que nosotros valoramos de este acompañamiento es estar aquí a su lado, saber que mientras estuvieron les dimos cariño, escucha, respeto, amistad y cuando vuelven les damos acogida y de nuevo el cariño, el respeto, la escucha, la amistad... Cuando llegan a veces tienen la mirada baja y se sienten tímidos, pero cuando les llamas por su nombre y les abrazas, aparece inmediatamente su alegría innata y te devuelven el cariño ciento por uno. Cuando uno ve a un joven que se aleja del programa da penita, pero al tiempo sentimos que aún les queda algún problema más por vivir, alguna dificultad más que pasar que les haga decir: SE ACABÓ, siempre queda la tristeza si acabará en alguna cuneta con una bala en el corazón, por eso cuando vuelven es recuperar al que "estaba muerto", uno se siente un poco Padre del Hijo Pródigo y es verdaderamente un sentimiento muy profundo.
Tenemos un grupito de 17 personas, de varias casas, a los que estamos preparando para recibir su bautismo y Primera Comunión, la celebración será el 8 de Junio, así es que nos despediremos de las comunidades con un arroz con pollo y "ensalaita", que es lo que aquí se come cuando se tira la casa por la ventana. Estamos buscando nosotros también recursos para que nos "cooperen" en éste evento, con regalitos y algo de plata para los almuerzos y "onces" (especie de meriendas), confiamos en que sea algo significativo para los chiquillos, hemos preparado las celebraciones con mucho cariño y participación, a ellos esto de sentirse importantes les encanta, aunque tengan 50 años. Será pues el colofón de nuestros dos años largos de misión, ya que tenemos nuestro pasaje de retorno a España,para el 14 de Junio y esta vez, sin vuelta.
Seguimos con nuestro trabajo normalmente en la Parroquia, con la catequesis familiar, área social y misionera, allí todo es mucho más sencillo y menos estresante, nos ayuda también a poner las cosas en un justo medio y compartir vidas de personas con problemas más normales que los que nos encontramos en nuestras comunidades, eso sí, la necesidad y la pobreza están presentes en nuestra población, pero es menos marginal.
De salud estamos muy bien, aunque esto de cumplir los "titantos" tiene sus cosillas, pero la verdad es que no hemos tenido de momento ni una gripe, José Luís está perfectamente de su operación.
Muchos cariños para cada una y uno.
Os queremos
José Luís y Matty
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