miércoles, octubre 08, 2008

Abril 2006

Hola Hola:

Aunque, casi con total seguridad, la persona a de la que voy a hablar no lo va a leer, me gustaria recordar aquellos días de abril (Semana Santa) en Cadiz.

El mejor día de los tres que estuve en el mes de abril fue el segundo, en el primero unicamente llegue, (ya conocía la ciudad) y me dispuse a alquilar una habitación en un hostal, eran las ocho de la tarde y afortunadamente sólo les quedaba un apartamento (dos habitaciones, salón, cocina, cuarto de baño) para mi sólo, la pena es que sólo podía quedarme hasta las doce de la mañana del día siguiente porque a esa hora estaba reservado dicho apartamento para otras personas, el señor del hostal ni siquiera me hizó factura, sólo se quedo con una fotocopia de mi DNI y el dinero al contado.

ya había intentado contactar con la chica que va a la misma clase que Santi y Alicia en la Universidad de Cadiz (UCA), pero no tuve respuesta hasta las diez de la noche, dijo que estaba muy cansada y que no quería salir, así que me dispuse a "aprovechar" el apartamento (durmiendo) desde las 12 hasta las 8 de la mañana, mejor dicho intentando dormir, porque en la calle principal de Cadiz no paran de pasar coches, (sólo paran el minuto y medio que dura el semaforo en rojo, momento que utilizaba para dar una cabezada), de todas formas al día siguiente no estaba muy cansado.

El día siguiente descubrí que mientras "dormia" (poco pero algo sí) habian intentado contactar conmigo (yo apago el movil por la noche) para salir a tomar algo, pero yo tenía que dejar el apartamento a las doce, después de desayunar y dar una vuelta por la playa me dispuse a cambiarme a un hotel, que esta estupendo (con su calefaccion- aire acondicionado), si bien es verdad que más caro que el apartamento y en la habitación estaba, durmiendo la siestecita (digo siestecita porque duro veinte minutos) cuando recibí  a las tres y veinte el mensaje que decía que quedabamos a las cuatro y que me invitarias a un helado, el mensaje (sms) me despertó de la siestecita y enseguida me arreglé para acudir a la cita en la puerta de tu casa (aunque tú no saliste del portal, sino del fondo de tu pequeña calle (100 metros de largo), no fue un encuentro tan emotivo como el de diciembre (2005), enseguida nos fuimos a la parte antigua de la ciudad, andando (casi una hora), me preguntaste si quería ir por el sol o la sombra, tú querías ponerte morena y yo quería un poco de sol y otro poco de sombra, mientras me contabas tus proyectos nos cruzamos con un chico que se quedo mirandote, (como si hubiese visto a cualquier estrella de cine) yo con la mirada le dije "ya ves, soy un hombre afortunado de estar a su lado" y luego pensé "más afortunado es su novio". Después como habías prometido nos tomamos juntos un helado, sin hablar demasiado, mientras mirabamos a la gente que acompaña las procesiones, un poco más tarde vimos a Abraham (quien intento quedar conmigo por la noche) haciendo un descanso mientras llevaba con su hermandad a cuesta un paso de semana santa yo me pregunto ¿como puede estar por la noche de juerga, y por el día llevando a cuestas una imagen de Cristo llevando la cruz y un soldado Romano a Caballo (el paso de Semana Santa)? eso sí que es duro, no los campos de trabajo que hacemos  

otro día continuo. 



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